HACE FALTA UN FINANCIAMIENTO INTEGRAL EN LOS MUSEOS

Los trabajadores le respondemos a #Avelluto
La resolución 268-E/2017 del Ministerio de Cultura de la Nación, emitida el 17 del corriente y publicada dos días más tarde en el Boletín Oficial, parece un desafío abierto al principio de no contradicción aristotélico, el cual sostenía que no se puede predicar simultáneamente A y -A.
En efecto, al tiempo que ella proclama la gratuidad del acceso a todos los museos nacionales, afirma en sus considerandos que eso no excluye la eventual implementación de “un régimen de tarifas y aranceles”. ¿Cuán eventual será tal implementación? Eso queda librado a la decisión de las autoridades del Ministerio.
Por otro lado, lo cierto es que varios de los museos nacionales actualmente no cobran entrada. La aplicación de la 268-E/2017 tendría, por ende, la paradójica consecuencia de arancelar lo que hoy es gratuito.
La falsedad del anuncio de gratuidad queda así rápidamente puesta en evidencia. Sin embargo, no queremos limitarnos a este señalamiento. Lo esencial es que la resolución introduce nuevas dudas e inquietudes respecto al financiamiento de los museos, cuestión que ya es crítica y que sólo admite una solución: el financiamiento integral de los museos nacionales por parte del Estado.
Lejos de eso, las declaraciones que acompañaron al falso anuncio de gratuidad parecen ir en la dirección contraria, esto es, en la de la celebración y el fomento del auto-financiamiento de cada museo. Habiendo llegado a este punto, nos vemos obligados a repasar la situación de esas dependencias.
El Ministerio de Cultura se limita hoy en día a pagar los sueldos y los servicios básicos de los museos nacionales, como así también a enviarles unas pocas cajas chicas por año. El resto del dinero que ellos requieren para su funcionamiento lo consiguen mediante el cobro de entradas o actividades culturales. Por una cuestión legal, tal cobro lo realizan las asociaciones de amigos,asimismo puestas en duda en estos días de cambios.
Pero más allá del tema del estricto funcionamiento cotidiano, la mayoría de los museos (al menos de aquéllos que poseen sede propia) se encuentran en un estado edilicio lamentable. A lo que se suma la precariedad laboral que sufren sus trabajadores, la cual adquiere diversas formas.
La crisis de los museos posee un carácter realmente estructural.
El falso anuncio de gratuidad y la glorificación del auto-financiamiento parecerían indicar entonces que el Ministerio se va a desentender aún más de estas dependencias. Lo que antes se daba como una deplorable pero inevitable situación de hecho, ahora quizás será festejado. El museo pasa a ser entendido como una "entidad lucrativa". No sería extraño, en consecuencia, que, en un futuro cercano, los museos pequeños tuviesen que elegir entre perecer o desvirtuar por completo el fin para el que fueron creados.
Estas últimas señales por parte de Avelluto y Américo Castilla (ex Secretario de Patrimonio devenido en asesor) hacen temer un agravamiento de la situación. Si no son éstas sus intenciones, llamamos enérgicamente desde la Junta Interna de ATE del Ministerio a que lo demuestren en la práctica, con aumento de presupuesto para los museos y sacando de la precariedad laboral a su trabajadores.
Asimismo, recordamos que el acceso libre y gratuito a todos los museos constituye una de nuestras reivindicaciones. Eso no significa, sin embargo, que nos dejemos engañar cuando ese lema se usa para esconder fines aviesos. Las autoridades deben comprender que quienes trabajamos en los museos no asistiremos pasivamente a su destrucción.
JUNTA INTERNA ATE
MINISTERIO DE CULTURA DE LA NACIÓN

 

Comentarios